Si formas parte de algún equipo que compite en las categorías más elevadas del fútbol nacional (Tercera División, Regional Preferente, División de Honor Juvenil), las opciones de conseguir una beca de alto valor en los mejores equipos universitarios se multiplicarán. Los coaches que buscan jugadores de este perfil se encuentran en División I de NCAA y poseen los recursos necesarios, tanto deportivos como académicos, para que exista la opción de dar el salto a la práctica profesional una vez finalicen los estudios. Bajo este criterio, es posible obtener becas de hasta el 100%, que cubran todos los gastos de alojamiento, matrícula, alimentación y todo aquello relacionado con el deporte.

Si tu perfil no es tan distinguido, no hay de qué preocuparse. Si formas parte de equipos que compiten en categorías inferiores (Nacional Juvenil, Primera Regional) hay muchas universidades pertenecientes a NCAA División II, NAIA, incluso NJCAA, que permiten continuar con la práctica del fútbol a un alto nivel, mientras se cursan estudios universitarios a través de una beca. Bajo este nivel, puede ser más complicado optar a una subvención del 100%, ya que es más probable que la inversión a realizar por parte de las universidades fluctúe entre los 6000 y 15000 euros anuales, para futbolistas masculinos, y hasta 9000 euros para futbolistas femeninas. Por supuesto, estas estimaciones cubren alojamiento, matrícula, alimentación y todo aquello relacionado con el deporte.

El gran punto a favor que tiene el sistema educativo universitario estadounidense es que existen innumerables opciones para los deportistas. A pesar de no poseer un nivel deportivo elevado, puedes optar a conseguir una beca en los Estados Unidos.